Describimos un proyecto interesante, aunque todavía sea del tipo analógico, pero que sirve para monitorear eventos a distancia usando una frecuencia libre de la banda de FM. El circuito emite bits intervalos cuya cadencia se altera cuando algún objeto o persona entra en el campo de actuación de su sensor.
Las ondas de radio, es decir, las ondas electromagnéticas, son generadas por dispositivos eléctricos y electrónicos. En el pasado, cuando las transmisiones se efectuaban en las frecuencias muy bajas (olas largas) los generadores eran en realidad alternadores electromecánicos. Se asemeja a un generador de corriente alterna, sólo que la frecuencia era muy por encima de las frecuencias industriales (40 - 60Hz). Normalmente estos generadores operaban en las bandas de 60 KHz a 100 KHz.
Uno de los problemas que ocurre con el ensamblaje de transmisores, con circuitos elementales no muy elaborados es que las veces los ensambladores no pueden obtener el máximo rendimiento, y existe la producción de señales capaces de interferir a un nivel en no deseado en otros equipos. Estas señales terminaron interfiriendo con los aparatos cercanos como receptores, radios y la TV. El uso de antenas inadecuadas, la ausencia de filtros y la configuración imperfecta es la causa principal de estos problemas cuyas soluciones se abordarán en este artículo. Este artículo es parte del libro transmisores para principiantes, de nuestra autoría (agotado).
Este artículo de 1980 fue escrito por nuestro colaborador A. Fanzeres y aquí reproducido con el permiso de su hijo A. Fânzeres Jr. El artículo describe las antenas de cuadro y su uso en radiogoniometría.
Si en un sistema transmisor-receptor la antena es el eslabón más débil, más vulnerable, el acoplamiento de la misma al transmisor es uno de los puntos cruciales de todo el proceso de transmisión. Diseñar y construir circuitos osciladores, separadores y de potencia es relativamente fácil y podemos decir que es algo concreto con lo que se lee. Sin embargo, cuando llega a la etapa de transferencia de la potencia de RF del tanque final a la antena, casi siempre situada en lugares altos, fuera del alcance que se tiene a los otros equipos en la bancada, las cosas empiezan a ser más difíciles.
Normalmente las personas que instalan enrutadores inalámbricos en sus casas no se toma muy en serio la forma en que lo hacen. Sólo cuando el rendimiento está por debajo de lo esperado y ciertas áreas no se alcanza es que la gente se da cuenta del problema.